Matilde Eugenia Perez Tamayo
PRESENTACIÓN
La voz del Papa Francisco resuena en la Iglesia y en el mundo, como una voz profética que anuncia con vigor y valentía, a tiempo y a destiempo, como dice el apóstol, el mensaje de amor de Jesús.
Es una voz cálidad, tranquila, pero siempre clara, firme y segura. Sus palabras son profundas y contundentes, amorosas y motivadoras, y van acompañadas de gestos también proféticos, que las confirman.
Con sus palabras y con sus gestos, el Papa Francisco nos invita a tomar conciencia de la belleza, la verdad, y la alegría del amor de Dios, de la Buena Noticia de Jesús, y de nuestra tarea como discípulos y misioneros suyos. Y también, por supuesto, de la realidad del mundo en el que vivimos, que necesita nuestra presencia y nuestra acción comprometida, para vencer el odio, la violencia, la injusticia y la falta de fe, y construir junto a todos los hombres y mujeres de la tierra, la paz que todos anhelamos, y que se nos escapa día tras día, y el bien y la verdad que nos restituyen a Dios.
Sus homilías, sus mensajes y, en general, sus intervenciones públicas, son siempre un serio y constante llamado a todos y cada uno de nosotros, a vivir nuestra fe cristiana católica con más fuerza y emoción, fidelidad y coherencia, dignidad y valentía, para hacer vivo y eficaz, el reinado de Dios, que Jesús vino a anunciarnos, y por el que entregó su vida en la cruz.
Consciente de que todas estas enseñanzas del Papa Francisco, tan profundas y tan urgentes, no llegan con facilidad a muchas personas, por diferentes motivos y circunstancias, quiero poner a disposición de todos el presente trabajo.
Es una pequeña selección personal y juiciosa de algunas enseñanzas del Papa que pueden iluminar y fortalecer nuestro compromiso como creyentes, que buscan vivir su fe, de manera activa y eficaz, en la vida cotidiana.
La autora