José María La Porte
INTRODUCCIÓN
Redactar una introducción para un genio de la pintura como Miguel Ángel, Velázquez o Giotto es siempre difícil porque se trata de explicar en pocas palabras un torrente de creatividad, sintetizar en breves líneas el espíritu de un genio, el talento especial que lo ha hecho inmortal en la historia del arte. Si esta dificultad se encuentra en una actividad humana que tiene algo de divino, del reflejo creador de Dios, ¿qué se podría decir de una institución fundada por el mismo Cristo, el Hijo de Dios? Hay una riqueza infinita en la predicación de Jesús –que la Iglesia ha recibido y transmitido a las generaciones sucesivas–, en la gracia que se insinúa como motor de la vida de los primeros cristianos y de los santos que han encarnado el mensaje de Cristo a lo largo de la historia… La finalidad de este volumen es ofrecer una introducción a la Comunicación Institucional de la Iglesia, una síntesis dirigida principalmente a los seminaristas y a todos aquellos que se acercan por primera vez a este terreno, a todos los que tratan de explorar cuáles son los factores determinantes de la relación entre la Iglesia y la comunicación.
Jesús vivió poco más de treinta años en un espacio geográfico relativamente reducido, pero su mensaje se ha extendido progresivamente: el Verbo de Dios, la Palabra hecha carne, ha echado raíces en el corazón de millones de personas a lo largo de los siglos, la semilla se ha esparcido geográficamente, y hoy en día la globalización se está convirtiendo en una oportunidad formidable para que llegue hasta el último rincón de la tierra. La Iglesia posee una experiencia multisecular en la transmisión de una fe que ha impulsado la cultura, impregnándola de una visión trascendente, que ha potenciado las posibilidades del arte, de la literatura, de la música, hasta límites insospechados. Por ello parece importante tratar de reflexionar sobre cómo conseguir que la fe siga creando y generando cultura en el siglo xxi, un siglo marcado por el papel de los medios de comunicación. En esta línea, el presente volumen explora las nuevas vías que se abren para comunicar mejor la Iglesia y las verdades de las que es depositaria, en la cultura mediática.
Los diez capítulos que componen el volumen se estructuran en tres grupos temáticos: 1) marco magisterial y teológico de la relación entre comunicación y fe; 2) papel comunicativo de la Iglesia en una sociedad caracterizada por la actividad de los medios y de los profesionales de la información; 3) aspectos particulares que pueden ayudan a desarrollar una eficaz comunicación de la Iglesia católica.