La Práctica Liberadora de Jesús
Carlos Mesters oc
Presentación
No se puede pedir al Evangelio lo que él no puede dar. En los tiempos de Jesús no había fábricas de coches, ni organización de sindicatos. No había buses, ni tantas otras cosas que existen hoy. El Evangelio no tiene una receta para resolver todos los problemas existentes.
Pero en el tiempo de Jesús ciertamente existían:
• Gente explotada por un sistema injusto.
• Desempleo creciente.
• Empobrecimiento y endeudamiento creciente.
• Acaparamiento de tierras y creciente número de campesinos sin tierras.
• Ricos poderosos a los que no les importaba la pobreza de sus hermanos.
• Tensiones y conflictos sociales.
• Represión sangrienta que mataba sin piedad.
• Clases altas comprometidas con los romanos en la explotación del pueblo.
• La religión oficial era ambigua y opresora.
• Una piedad confusa y resistente de los pobres.
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