Padre Ángel Peña Benito O.A.R.
INTRODUCCIÓN
Este libro quiere ser una respuesta a algunos temas polémicos, que siempre suelen sacarse a la luz, cuando se quiere denigrar a la Iglesia por sus errores del pasado. Evidentemente, los hombres de la Iglesia, a lo largo de su historia bimilenaria, han cometido errores y pecados, pero éstos, sin querer justificarlos, hay que comprenderlos dentro del contexto de su época y de la mentalidad de aquellos tiempos, para no magnificar las cosas y no acusar a la Iglesia de sanguinaria, oscurantista, retrógrada o cosas parecidas.
La Iglesia, ha dicho alguien, es sancta et meretrix, santa y pecadora. Está compuesta de personas humanas con sus deficiencias. Incluso, ha habido Papas pecadores; pero, a pesar de las sombras del pasado, su luz sigue brillando como nunca y sigue iluminando las sendas del mundo con los rayos de la sabiduría y de la verdad. La Iglesia católica es la Iglesia fundada por Cristo, y Él prometió que nunca será destruida por las fuerzas del mal (Mt 16, 18). Ha pasado muchos momentos difíciles, en los que parecía que iba a sucumbir ante el crecimiento de las herejías o ante el poder de los reyes o ante la creciente incredulidad de los fieles. Pero siempre ha salido a flote y siempre estará presente en el mundo para guiarlo por el camino de la paz y de la verdad.
Este escrito quiere ser una pequeña aportación para conocer mejor a nuestra Iglesia católica y amarla como se ama a una Madre, con todos sus defectos y virtudes, y saber defenderla de aquellos que la ofenden y quisieran su desaparición. La Iglesia, con sus luces y sombras, con sus santos y pecadores, es la Iglesia de Cristo.
Ojalá que todos los católicos estén plenamente convencidos de la verdad de nuestra fe y sepan compartirla con los demás como buenos misioneros del reino de Dios. Les dedico este libro a todos los que buscan la verdad con sinceridad.